Corría el año 2020. El entonces presidente Alberto Fernández utilizaba la cadena nacional para anunciarle a los más de 40 millones de argentinos que iniciaba en el país un aislamiento preventivo, social y obligatorio (APSO) para contener y frenar el avance del COVID-19 que ya había azotado a distintos países de Europa. Encierro, muerte y desesperación. Hasta que llegó la esperanza en forma de vacunas. Y con ellas surgió otro mal.
El 25 de mayo de 2020 se realizó la primera convocatoria de personas con ideologías extremistas y "anticuarentena". Con los meses, esas células de extrema derecha se volvieron "antivacunas" y cobraron gran popularidad el 1° de septiembre de 2022, tras el intento de asesinato a Cristina Fernández de Kirchner. El atacante fue Fernando André Sabag Montiel, quien apuntó con una pistola Bersa -del calibre 7.65 mm, con munición real en su cargador- y gatilló en dos ocasiones contra la ex presidenta. El resto de la historia es conocida: las balas no salieron del arma y se confirmó que el agresor estaba vinculado al grupo ultraderechista "Revolución Federal".
Esa fue solamente la punta del iceberg, El sitio DataClave dio a conocer en las últimas horas las conexiones entre el presidente Javier Milei y otra célula extremista integrada por neonazis llamada "Fuerza UnidAria Argentina", la cual fue fundada el 15 de marzo de 2021 por Nicolás Alfredo Chivirino, bajo el alias de Nicolás Mercau. Si bien el libertario conmemoró a las víctimas del Holocausto, lo definió como "la tragedia más grande de la historia de la humanidad" y pidió tomar partido por Israel a comienzos de mayo, años atrás participó en eventos organizados por esta agrupación antisemita. E, incluso, aparece en varias postales junto a sus integrantes, que serían 15.
MILEI Y SUS LIBERT-ARIOS
La investigación, a cargo de la periodista Ivy Cángaro, detalla los antecedentes y actividades de los miembros de "Fuerza UnidAria Argentina", quienes actualmente apoyan las políticas libertarias del gobierno de Milei, destacando la relación entre estos individuos y su influencia en la política. La nota en cuestión detalla a varios protagonistas de estos grupos extremistas, pero se detiene puntualmente en Sebastián Claus Furlán, un personaje controvertido conocido por su participación en manifestaciones y su empleo en la Auditoría General de la Nación que sufrió un accidente a sus 14 años en un predio que pertenecía al Ejército Argentino.
Lo operaron y estuvo en coma hasta que finalmente se recuperó. Su familia demandó al Estado y, con la llegada del kirchnerismo, obtuvo un resarcimiento. Luego, se vinculó con figuras extremistas como José Derman -que se había filmado celebrando el atentado contra CFK y lo subió a la cuenta de YouTube-, Sebastián Poch, que fundó junto al anterior el "Centro Cultural Kyle Rittenhouse" (organización con sede en La Plata que fue allanada por vandalizar locales partidarios y monumentos públicos por la Memoria) y el propio Mercau. En aquel allanamiento, en lo que resultó ser la casa de Derman, las autoridades hallaron murales de Milei y Bolsonaro.
También secuestraron la bandera de Gadsen y el Wolfsangel de la iconografía nazi, y un proyectil mortero de 83 milímetros. Aquel procedimiento terminó con la detención de Derman. Aquellos vínculos le permitieron a Furlán codearse con Jonathan Morel, Gastón Guerra, Leonardo Sosa y Nilo Medina de "Revolución Federal". De hecho, el hijo de Danilo Furlán es uno de los extremistas que aparece frente a las cámaras en el escrache que recibió Sergio Massa el día que debía jurar como ministro y que derivó en una denuncia penal por "amenazas" e "incitación a la violencia". Junto a él se lo puede ver a a Guerra, increpando también al periodista Lautaro Maislín, de C5N.
Y aquí aparece la primera conexión entre el líder de la Libertad Avanza (LLA) y estos personajes: algunos integrantes de la Revolución Federal, como Brenda Uliarte, la joven que estuvo en boca de todos por su relación con Sabag Montiel y su discurso de odio, o Sabrina Basile, la hija del "Coco", aparecen en muchos de los actos que llevaba adelante el economista con su grupo de influencers, como "El Presto", "Tipito Enojado", Álvaro Zicarelli, "El Negro" Almeida, Hernán Carrol y "Dannan". Pero la pieza periodística también teje nexos entre Javier y la agrupación "Fuerza UnidAria Argentina", que promueve ideologías neonazis.
Esta organización tiene conexiones con personajes de la "Revolución Federal", seguidores de Milei y el "Centro Cultural Kyle Rittenhouse". Una Armada Brancaleone de supremacistas blancos. O algo así. Entre sus miembros destaca Poch, un fervoroso militante que promueve la "supremacía blanca" y el nazismo a través de videos y sus redes sociales, viviendo en un centro cultural donde pintó murales de figuras que admira, como Trump, Jair Bolsonaro, Milei, Mohamed Alí Seineldín, Ricardo Iorio, Novak Djokovic y Mario Malevo Ferreyra.
Mercau, en tanto, lideraba marchas contra la "plandemia" y se define como "Dirigente Unidario, Filósofo político, Investigador, Indiguista, Vegetariano, Avenindigo, Manganimeka, experto en Animé, Técnico de Pc y Sociólogo de Oficio". En sus redes posa junto a Agustín Laje y a Viviana Canosa, y aparece junto a Poch y Milei en un acto en el Obelisco contra el gobierno cubano hecho el 5 de septiembre de 2021. Una de sus banderas rezaba: "El anticomunista es el que leyó el Manifiesto y lo entendió" que colgaba de las rejas del monumento justo debajo de otra que decía "Fuerza UnidAria, Justa y Necesaria". Milei fue parte del acto, se tomó fotos y también brindó una charla.
En aquel discurso, el hoy presidente ponderó el accionar de "Fuerza UnidAria" y bregó por la libertad de los cubanos que padecen bajo el yugo marxista. Pero esa no fue la única vez que Milei protagonizó encuentros con los neonazis y antisemitas. El 6 de noviembre de ese mismo año, su cierre de campaña como candidato a diputado fue en Parque Lezama y allí estuvo Poch, con quien volvió a fotografiarse. ¿Lo curioso? Comparten un amigo en común: Nicolás Márquez, el biógrafo homoodiante de Milei y escritor de ultraderecha, quien también se tomó una foto rodeado de los integrantes de estas agrupaciones neonazis que suelen lucir camisas grises.
