No es la primera vez que Diana Mondino está en el ojo de la tormenta, lugar que -a juzgar por sus dichos- le queda cómodo. Sí, es la canciller de los grandes éxitos "los chinos son todos iguales" en medio de la renovación del swap con ese país. Pero esta vez cruzó un límite, al menos en las difusas fronteras delimitadas por el presidente, que -esta vez sí- está enfurecido con ella.
En medio del ataque el presidente plantó a 19 embajadores de países islámicos y a los periodistas acreditados en Casa Rosada que lo esperaban para celebrar su día. Un ritual que han mantenido todos los gobiernos desde el regreso de la democracia. Pero que, por un desliz de la Tía Diana, en 2024 no se cumplimentó. ¿Cuál fue el desliz? Se olvidó de avisarle a Milei que en el evento estaría el embajador palestino, poco más que la sombra de Belcebú para el líder libertario.
Y la tía pasó de tener un pie afuera del aula a tener orejas de burro y sentarse en el rincón. La decisión de bajarla del G7 fue un balde de agua fría para la Cancillería, donde consideran que es "abrirle la puerta para que se vaya". En Casa Rosada dicen que el presidente "prefiere eludir el protocolo y verse con quién él desea". De esta manera, Milei participará del Foro internacional sin reuniones bilaterales pactadas de antemano. Una mancha más a la larga lista de desaciertos diplomáticos. El libertario, devoto de los viajes, volverá a la Argentina para luego retornar a España y a Alemania a recibir premios de dudosa respetabilidad.
Por ahora, y solamente por ahora, la canciller tiene confirmada su presencia a la Cumbre por la Paz, en Suiza, organizada por el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky.
Sin embargo la operación desgaste está en curso. En las últimas horas, Karina Milei le arrebató de su órbita la ex Fundación Exportar y la trasladó a la Secretaria de Presidencia que ella coordina. Se trata de una fundación con participación público/privada para insertar a Argentina en el mundo. La dependencia maneja fondos sin los controles exhaustivos públicos del Estado. Con esta jugada dijo una fuente a LQC "Karina Milei acumula poder mientras que Diana lo pierde"
La agencia hoy se llama Fundación Argentina para la Promoción de Inversiones y Comercio Internacional y es manejada por Julián Cohen, que responde políticamente a Mondino. Se desconoce si será removido de su cargo. Los movimientos en esa agencia han sido habituales en los distintos cambios de gobierno. Durante la gestión de Mauricio Macri estuvo dentro del organigrama del Ministerio de Producción; luego, con Alberto Fernández, pasó a la Cancillería y ahora quedará dentro del esquema que administra "El Jefe". Fuentes maliciosas indicaron que podría ser la "caja" para camuflar los gastos de los viajes privados del presidente Javier Milei.
Diana Mondino, inmune a sus dichos, pasa sus peores horas dentro del gobierno. Con Javier Milei enojado con ella y Karina licuando sus funciones podría tener los días contados. El desgaste comenzó luego de su viaje a China. La canciller no solo volvió con las manos vacías sino que además cometió un exabrupto al decir que "los chinos son todos iguales". En el Gobierno creen que la falta de novedades provenientes del gigante asiatico para renovar el swap se deben a la mala estrategia de negociación que incluyó a Mondino. No se descarta que Argentina tenga que abonar el primer vencimiento y después seguir negociando.
