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Chau chau adiós: saluden a la clase media porteña que se va

Según datos de la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires ya hay más de un millón de pobres en CABA. La pobreza tocó el máximo histórico de la serie iniciada en 2015, con un 35,5% de personas que no pueden superar la línea de la pobreza. El impacto de la motosierra y la licuadora.
01-07-2024
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En solo tres meses de 2024, volvió a crecer la pobreza en la Ciudad de Buenos Aires a costa de la degradación de la clase media. Se sumaron 155.000 nuevos pobres. En el cuarto trimestre de 2023 eran 928.000 los que no superaban la línea que establece el Indec en la ciudad más rica del país, y hoy son 1.083.000 personas.

Esos nuevos pobres son los caídos de clase media, que se redujo en 100.000 personas. Medido por niveles de ingreso, el estamento inmediatamente superior en la pirámide social perdió casi 18 puntos porcentuales respecto de su mejor registro, que fue el tercer trimestre de 2017. Entonces totalizaba 1.691.000 personas. En 2015, cuando comenzó la serie estadística, la clase media llegaba al 51,9% y ahora al 37,4%.

En tanto la pobreza alcanzó al 35,1% versus un 30,1% a fines de 2023. La pobreza infantil alcanzó al 44% de los menores de 17 años (301.000). Un año atrás, el 37,4% de los niños, niñas y adolescentes (0-17 años) residían en hogares en condición de pobreza y la indigencia saltó de 8,4% a 15,3%, comparado con el mismo período del año pasado.

Según el informe "En un contexto de reducción de la tasa de actividad y de empleo, la expansión de los ingresos laborales y no laborales no resulta suficiente para compensar los aumentos de precios. En consecuencia, las condiciones de vida de los hogares de la Ciudad se deterioran en forma generalizada, afectando el acceso a las canastas básicas y reduciéndose el peso de los sectores medios y acomodados". Al final la casta era la clase media. "Se reduce el peso de los sectores acomodados, que pasan de 11,8% de los hogares a 6,5% en un año. Su población se redujo del 8,2% al 5,3%", concluye el documento.

Cae la clase media, crece la pobreza y también la indigencia que casi duplica su incidencia respecto al mismo periodo del año anterior, tanto en hogares (10,8% vs. 5,5%) como en personas (15,3% vs. 8,4%). Se trata de personas y hogares que  no logran en un mes los ingresos necesarios para poder comprar la canasta básica alimentaria.

 

Según el informe la motosierra y la licuadora castigan más a:

  • Los hogares encabezados por mujeres (donde la incidencia de la pobreza es de 34,4%, frente a 26,2% con jefe varón).
  • Los hogares encabezados por una persona desocupada o por una ocupada en servicio doméstico.
  • Los hogares que están ubicados en la zona sur y a los que tienen niños y niñas de menos de 14 años, estos últimos con incidencias de la pobreza y de la indigencia crecientes con el número de niños y niñas en el hogar.
  • Los hogares con presencia de adultos mayores que están en situación de pobreza se ubican en 30%, un valor cercano al del total de población.

Así las cosas, los hogares en situación vulnerable representan el 11,4% (154.000 hogares) y en ellos vive el 11,3% de la población (349.000 personas). Sumados al conjunto de hogares en condición de pobreza conforman los hogares en vulnerabilidad, que ascienden a 41,8% (unos 565.000 hogares), en los que habita el 46,4% de la población (unas 1.432.000 personas). 

El primer semestre de gobierno libertario modificó las principales preocupaciones de los argentinos. Una encuesta realizada por la consultora Equipo Mide sobre el primer semestre de la administración de Milei arrojó que los mayores temores de la población hoy son: la pobreza (23%), la desocupación (15%) y la inflación (14%). Más atrás aparecen la corrupción (12%), la inseguridad (10%).

 

 

 

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