Algo huele mal en Corrientes: ahora resulta que fue un "accidente"
El caso Loan conmovió a la sociedad argentina. Las múltiples hipótesis pusieron al desnudo la fragilidad institucional de la provincia de Corrientes: trata, venta de órganos, tráfico de niños, todo gravísimo. El gobernador, Gustavo Valdés, apareció en público para dar una conferencia de prensa con el fin de desligarse de un audio que le atribuyeron. Antes de eso, hay sospechas de que pasó el fin de semana XXL en Punta del Este. Y, en el medio, la aparición de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que se apersonó en Goya 11 días después de la desaparición del pequeño.
Tras su visita a Corrientes, Bullrich cometió un blooper que debiera se imperdonable: aseguró que viajaría con equipos radiológicos para inspeccionar la panza de los pumas y yacarés de la zona, una zona en la que no hay ni pumas ni yacarés. Y dijo que convocaría a personal de montaña. En Corrientes: montañas.
Una vez que esto pasó al ámbito federal y que el escándalo copó todas las pantallas y medios nacionales, lo turbio. Apareció en escena el abogado José Codazzi para representar al tío de Loan. Declaró en la televisión que a su cliente lo torturaron para señalar a "alguien" y luego fue la mente maestra detrás de la "confesión" de la tía Laudelina, quien apuntó contra el matrimonio de Carlos Pérez y Victoria Caillava: dijo que atropellaron al niño con su camioneta y se deshicieron del cuerpo. De esa manera el delito pasa a convertirse en un accidente y regresa a la Justicia correntina, donde Codazzi tiene aceitados vínculos y donde el gobernador tiene una clara injerencia.
Minutos antes de que trascendiera esta "confesión", el gobernador Valdés, que había brillado por su ausencia, tuiteó que había habido grandes avances en el caso Loan, que estaría casi resuelto. ¿Cómo lo supo? ¿Y la división de poderes? Bien, gracias.
El abogado Fernando Burlando señaló la existencia de una posible complicidad entre la familia de Loan y las autoridades políticas, policiales y judiciales de Corrientes. Estas acusaciones han puesto en tela de juicio la integridad del gobierno provincial y su manejo del caso. Mucho más cuando se conoció que Laudelina estuvo alojada en un apart hotel en el centro de la capital correntina cuyo dueño es el primo del ex jefe de policía local. Hacia allí se dirigió una multitud para repudiarla.
Los fiscales federales que investigan la desaparición de Loan Danilo Peña pidieron detener a su tía Laudelina, luego de que denunciara en la Justicia provincial que el chico había muerto en un accidente, al ser atropellado por Carlos Pérez, principal acusado del caso. El pedido fue realizado a la jueza del caso, Cristina Pozzer Penzo, por Mariano de Guzmán y sus colegas Marcelo Colombo y Alejandra Mangano, estos dos últimos a cargo de la PROTEX, el área de la Procuración que investiga delitos de trata. Sin embargo, la magistrada se negó a aceptar el pedido.
El planteo de los fiscales, realizado ayer, se basó en la sospecha de que Laudelina supuestamente plantó el botín de Loan para confundir a los investigadores en el comienzo de la búsqueda. Según las mismas fuentes, existen indicios de que la tía de Loan habría participado en plantar esta prueba. Por eso se allanó su casa y se secuestró su teléfono el miércoles pasado, aunque no fue imputada de inmediato.
La ministra Bullrich volvió a Corrientes. Esta vez a 9 de Julio, el pueblo de los Peña, adonde nunca había estado. Allí se fotografía con cara de compungida junto al naranjal donde Loan fue visto por última vez. Y escribió: "Estoy en 9 de Julio, Corrientes, para acompañar a la jueza federal Cristina Pozzer Penzo y a las Fuerzas Federales en la investigación y los rastrillajes para encontrar a Loan. Ninguna hipótesis descartada. Todo nuestro esfuerzo puesto aquí", dijo la ministra en su posteo, donde también compartió algunas fotos de las tareas realizadas.