Sandra Pettovello está en problemas y lo sabe: su máxima preocupación es quién pagará sus abogados una vez que deje el poder. Este lunes se conoció que la defensa de la ministra pidió hace un mes que se cierre la causa que investiga el manejo indebido en la distribución de alimentos por "inexistencia de delito". El juez Sebastián Casanello no solo no la cerró, tampoco citó a la ministra a declarar como testigo lo que augura un mal presagio para la ministra.
En las últimas horas, la ministra de Capital Humano volvió a reunirse con su amigo, el presidente Javier Milei. Según trascendió, le llevó el nombre de un dirigente cordobés para que la reemplace en su puesto. Mientras tanto, Milei cree que la ministra todavía puede revertir la situación y le exige al resto del gabinete que sigan su ejemplo de "destapar curros". En el gobierno son cada vez más las voces que coinciden en que la sucesión de escándalos en Capital Humano salpican al resto y es hora de pensar en la salida de la ministra. Un adelanto del estudio nacional de Zuban Córdoba reveló que casi un 60 por ciento de los encuestados cree que debería renunciar.
Mientras tanto, el Gobierno oficializó este martes a dos nuevos funcionarios: Martín Galmarini y David Guido de Graaff estarán encargados de políticas sociales. Por su parte, Pettovello no irá a Diputados a dar explicaciones por los escándalos que recaen en su cartera. El presidente de la Cámara Baja, Martín Menem, no envió a la ministra de Capital Humano el pedido que le realizó la oposición en la Comisión de Salud y Acción Social.
SE CIERRA EL CIRCULO SOBRE PETTOVELLO
Un documento revelado por el programa "Argenzuela" (C5N) demostró que el gobierno conocía a la perfección el stock de alimentos, la calidad y sus fechas de vencimiento al menos desde el mes de marzo. Un informe de 25 páginas es el escrito que el apoderado de Capital Humano -Martín Huidobro- presentó el pasado 5 de marzo en respuesta al amparo judicial presentado por la Defensora de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, Marisa Graham, en el fuero Contencioso Administrativo.
La primera respuesta pública de Capital Humano, el 13 de febrero, fue reconocer que el gobierno había suspendido la entrega de comida bajo la justificación de que trabajaban en un "nuevo sistema de transferencia" "directa" y "sin intermediación". El no envío de alimentos luego se transformó en una causa penal impulsada por el dirigente social Juan Grabois.
La Subsecretaría Legal de Capital Humano respondió primero al fuero Contencioso Administrativo con el detalle de de los alimentos. El texto impacta por su precisión y choca de frente con la mentira del gobierno. Los alimentos son de buena calidad así lo indica el punto número dos del escrito: "En cuanto a la revisión de los productos alimentarios, los mismos son previamente analizados por el Instituto Nacional de Alimentos (INAL) el cual depende del ANMAT, dicho organismos verifica mediante análisis que los alimentos cumplan con las normas del Código Alimentario Argentino en términos de calidad, normativas higiénico-sanitarias, bromatológicas y de identificación comercial"
El informe es acompañado por imágenes de los dos depósitos investigados, el de Villa Martelli y el de Tafi Viejo, y reconoce la existencia de los dos convenios firmados con organismos internacionales: "El Ministerio de Capital Humano firmó un convenio por 20 mil millones de pesos para la compra de 5 millones de unidades de alimentos con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI); en el marco de la ampliación del Programa de Abordaje Comunitario" dice el escrito presentado por el apoderado legal del ministerio.
El acuerdo con Naciones Unidas abrió nuevas sospechas. Pettovello autorizó con su firma la transferencia de 14.000 millones de pesos al "Proyecto del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la comida no apareció. La Ley de Administración Financiera establece que si el desembolso supera los 2.700 millones de pesos debe llevar la aprobación de la Jefatura de Gabinete.
La historia es conocida, el gobierno montó un cúmulo de mentiras sobre la calidad, cantidad y fecha de vencimiento de los alimentos. Primero criminalizó a las organizaciones sociales, luego dijo que eran para catástrofes climáticas. Las inclemencias sucedieron y los alimentos siguieron allí sin repartirse hasta que la justicia puso contra las cuerdas a Pettovello y la obligó a repartir al menos la leche en polvo. El documento oficial del ministerio de Capital humano desarma las coartadas del gobierno y expone lo obvio: no hay manera de que Sandra Pettovello no supiera de la existencia y la fecha de vencimiento de los acopios.