Milei echó a Nicolás Posse: el ex "Mudito": ¡Afuera!
La versión oficial dirá que el motivo fue "diferencias de criterios y expectativas en la marcha del Gobierno y las tareas encomendadas". Sin embargo, el Jefe de Gabinete -Nicolás Posse- y su hombre de confianza al frente de la Agencia Federal de Inteligencia -Silvestre Sívori- se van juntos en medio de una feroz interna que incluyó sospechas de espionaje, algo que (además de ser ilegal) en política no se perdona fácil.
Posse intentó resistir. El viernes habló con periodistas y con empresarios. Les dijo que era víctima de una "terrible operación" encabezada por Santiago Caputo, el encargado de armarles el algoritmo de Yrigoyen al presidente y su hermana Karina. Con tono catártico, contó que no tenía más llegada a Javier Milei y que incluso el presidente había dejado de asistir a las reuniones de gabinete para no cruzarlo.
El sábado, Posse intentó mostrarse firme en su cargo. Participó del Tedeum en la Catedral Metropolitana y viajó a Córdoba. Dos instancias que dejaron al desnudo el nulo trato entre los ex amigos de Corporación América. Milei evitó saludarlo y eligió elogiar una vez más, al rockstar de las finanzas Luis "Toto" Caputo. Por la tarde también viajó a Córdoba y estuvo en el (P)Acto de Mayo.
El nuevo viaje de Milei a los Estados Unidos abrió un interrogante ¿Posse podía permanecer al frente del Gabinete sin diálogo con los hermanos Milei aun cuando en Casa Rosada daban como un hecho su salida? La respuesta que Posse no quiso ver era cantada: no.
De todas formas, el persistente Posse fue el lunes a Casa Rosada. Recibió en su despacho al ministro de Economía Caputo. Almorzaron antes de la partida del "Messi de las finanzas" a Estados Unidos. Caputo también teme su salida. Los dólares que prometió no aparecen y Milei ya le abrió la puerta a Federico Sturzenegger para esta nueva etapa. El platense asumirá como ministro de Modernización.
CAMINANTE NO HAY CAMINO, SE HACE CAMINO AL ANDAR
La relación de Karina con Posse se rompió hace un tiempo. En Casa Rosada aseguran que hubo un cúmulo de diferencias que no se pudieron subsanar, pero lo que estalló el vínculo fue la sospecha de Karina Milei de que Posse usaba a la AFI para espiarlos. El también eyectado titular de la AFI era hombre de el Mudito. Pero Karina también desconfía de otra persona cercana al ahora ex Jefe de Gabinete: Gladys Noemí Humenuk, hoy dentro de la Secretaría General de Presidencia que ella controla.
Desde hace meses las mujeres con mayor influencia sobre Javier Milei, su hermana y la ministra Pettovello decían que Posse las espiaba. La titular de la cartera de Capital Humano contó a su entorno que el ex jefe de gabinete sabía de viajes suyos y encuentros personales. Apenas puso un pie en el gobierno Posse peleó y ganó una batalla con la vicepresidente Victoria Villarruel, por el control de la AFI. Todo dura un instante.
Milei había dicho que el recambio vendría después del derrotero de la Ley Bases pero no aguantó y quemó una bala. El perfil de Posse también le jugó en contra, el gobierno quiere un jefe de gabinete que actúe como vocero algo que el "mudito" resistía. Por eso sonaba Guillermo Francos para reemplazarlo, un hombre que habla con todos en público y en privado.
Atrás quedaron los días en Corporación en América, en los que Posse prestaba atención al excéntrico economista que nadie quería escuchar. Las charlas podían ser de rock, del corredor Bioceánico que proyectaban juntos o de las trabas que el Estado le ponía a los privados. Burocracia le llaman. Hoy también le pasó factura a Posse.